En una cena que aparenta ser una despedida cordial, la tensión entre Pablo y Marina crece hasta estallar. Lo que empieza como un adiós amistoso se convierte en un momento incómodo y doloroso, culminando en un monólogo desesperado de Pablo, que deja al descubierto su rabia, orgullo herido y un amor no correspondido.
Duración: 6'
Género: Terror, Thriller
Año: 2025
CAST: Marco Sanfilipo y Laura Porta
DIR y GUIÓN: Ton Fumadó Badia
AD: Yuval K.
DOP: Alejandro Muñoz
PRODUCER: Joana Vosseler y Mario Latorre
ARTE: Ayla Fernández y Alba Galbe
BSO: Guillem Casellas
MONTAJE: Ayla Fernández
COLOR: Esteve Ribas
GAFFER: Víctor Albarce
ELÉCTRICOS: Guerau Carabén y Tomás Cabrera
SONIDO DIRECTO: Isabel Uris
Es Por Ti nace de una práctica de adaptación a partir de un guion extraído de la película Happiness. Sin saber de qué película se trataba ni a qué escena pertenecía el texto, desde el primer momento sentí el impulso de llevarlo hacia el terreno del thriller psicológico, casi del terror. Ese fue el punto de partida de lo que para mí ha sido un verdadero reto personal.
Era la primera vez que trabajaba con un guion que no era originalmente mío, aunque introduje algunos cambios para adaptarlo a mi mirada y al tipo de historia que quería contar. Desde hace tiempo quería hacer un cortometraje de terror psicológico, y esta práctica me ofreció la ocasión perfecta para explorar el género desde un enfoque íntimo, contenido y perturbador.
Mi principal objetivo era generar incomodidad. Quería que cada elemento —la luz, el color, los silencios, la interpretación— trabajara a favor de esa sensación. La estética general del corto se construye sobre un lenguaje visual frío y estático: la cámara apenas se mueve, generando una tensión contenida que refuerza lo incómodo.
Opté por el uso de ópticas angulares no tanto para distorsionar, sino para amplificar la distancia emocional entre los personajes y su entorno. Esto me permitió componer planos con gran presencia espacial, donde el blocking cobra importancia: los movimientos y posiciones de los personajes están cuidadosamente coreografiados dentro del encuadre para intensificar el conflicto interno y el malestar no verbalizado.
Hay algo teatral en el planteamiento —los personajes, encerrados en una sola localización, en un único acto que se despliega como un duelo— pero lo teatral queda suavizado por una dirección de cámara profundamente cinematográfica. La puesta en escena juega a favor de esa tensión sorda, donde lo que no se dice pesa más que cualquier diálogo.
Buscaba que al principio el espectador empatizara con Pablo, y que poco a poco esa empatía se desplazara hacia Marina, hasta temer por ella. Ese miedo no nace de lo explícito, sino de lo sugerido. Por eso, el corte final a negro no es un cierre, sino una invitación a la imaginación del espectador: ¿qué pasa después? ¿Qué es capaz de hacer Pablo?
Es Por Ti me ha permitido experimentar, salir de mi zona de confort y jugar con lo sugerido más que con lo evidente. Más que una práctica, ha sido un ejercicio de atmósfera, tensión y mirada. Una historia incómoda, en un mundo incómodo.